Ya sé que el alcohol no es la salida para ningún problema (no se mal viajen), pero una copita jamás le ha hecho daño a nadie y mucho menos cuando andas medio bajoneada por la vida misma.
Así que si eres fan del vino y quieres un pretexto pa echarte una copita, checa cuál va mejor dependiendo del problema que traigas encima.
Corazón partido
Merlot
Este tipo de uva se caracteriza por su suavidad y finura, o sea, la delicadeza con la que tu roto corazón necesita ser tratado.
Tristeza
Rosé
Por lo general son vinos afrutados, frescos y equilibrados, perfectos para no cargar peso a tus emociones sino más bien lograrás aligerarlas y darle color a tu ánimo.
Ansiedad
Cabernet Sauvignon
Son intensos y con gran cuerpo, así como la ansiedad que te está invadiendo. Pero aunque no lo creas, la fortaleza de esta uva te ayudará a controlar tus emociones y a disminuir esa horrible sensación que sólo la ansiedad te deja en el cuerpo.
Mal humor
Espumoso
Este tipo de vinos son dulces, livianos y divertidos. Justo lo que tu mal humor necesita, las burbujas ayudarán a disipar esa nube negra que se posó sobre tu mente.
Decepción
Syrah
Una uva que da un sabor poderoso, afrutado y seco, lo que lo convierte en el vino ideal para la decepción. Te ayudará a aterrizar tus ideas y sentimientos.
Añoranza
Malbec
Este tipo de uva le da al vino un sabor cálido, suave y agradable, justo todo lo que tu añoranza necesita para poder recomponerse.