Cosas que sólo entendemos las chicas sin sentimientos

Hay chicas que no somos tan dramáticas para vivir y tenemos la ventaja de poder preocuparnos por cosas realmente importantes. No voy a negar que tenemos un poco o tal vez mucho de antisociales, pero no es porque estemos locas. Esta conducta es simplemente porque no nos gusta complicarnos la vida con cosas irrelevantes que muchas personas hacen.

Las chicas que tampoco “tienen sentimientos” (como mucha gente nos dice) se sentirán identificadas con esto:

No nos cuesta trabajo terminar a alguien

Si alguien nos comienza a hacer drama por tonterías, nos es infiel o incluso porque nos aburre, nosotras tenemos la ventaja de no darle vueltas al asunto y terminamos la relación por teléfono, mensaje, en persona da igual. Así de sencillo.

Agradecemos a la vida terminar la escuela para no volver a ver a nuestros compañeros

A lo mucho iremos a extrañar a una o dos personas, pero todos los demás nos da igual el qué vaya a ser de sus vidas.

Odiamos al 99% de la población

Nos molestan las personas lentas, los niños (excepto los nuestros), los que no dejan espacio detrás de ti en la fila del banco, a veces los suegros, la gente en el cine, adolescentes, etc…

Te desquician las mujeres que lloran por todo

Ver a una mujer llorar porque su novio de 2 días la terminó o porque no le llama y está paranoica pensando que le están siendo infiel, nos causa un corto circuito en nuestro cerebro.

sin sentimientos

Tenemos la capacidad de burlarnos de nosotras mismas

Si nos sucedió algo por lo que otra persona se estaría cortando las venas, nosotras sacamos bromas de eso y seguimos adelante con nuestras vidas.

Eliminamos a amigos de Facebook sin importar que los conozcamos de toda la vida

No es que no queramos volver a saber de ellos, simplemente nos causan dolores de cabeza sus estados en donde siempre se están cortando las venas, mandando indirectas a todos o tomándose selfies iguales un día tras otro.

Somos las peores personas dando consejos

Aquí la aclaración: No es que nuestros consejos sean malos. Lo que sucede es que siempre decimos las cosas como son (sin filtros) cuando nos piden una opinión y nunca decimos lo que la otra persona quiere oír.

Ejemplo:

– Amiga, ¿crees que lo debo terminar y por qué?
– Porque es feo, tonto, bobo, me cae mal y se peina con mucho gel.

Tenemos un sentido del humor que no muchas entienden

No entendemos por qué la mayoría de la gente se ríe con comediantes que dicen cosas sosas o con programas de televisión de humor muy bobo. Nosotras necesitamos un humor más ácido para poder morir de la risa.

tenemos un

Todos dicen que estamos amargadas y que moriremos solas

Y posiblemente sí, tengan razón. Pero mejor solas que mal acompañadas.

Jamás nos dejamos de alguien y explotamos muy fácil

No toleramos un mal servicio en un restaurant, ni que nos intenten bulear y mucho menos que alguien quiera hablar mal a nuestra espalda.

Odiamos hacer trabajos en equipos y depender de otros

Una de las peores cosas que nos puede suceder, es que nos dejen un trabajo en equipo o en el trabajo nos asignen a un equipo para llevar a cabo un proyecto. Es desquiciante que mucha gente pierde tiempo y nos hace quedar mal por su culpa.

No perdonamos

Si una amiga, prima, etc… nos falla, no nos cuesta trabajo alejarla de nuestra vida. Sabemos que si lo hizo, entonces no somos indispensables en su vida.

Nos dan ganas de aventarle lo primero que encontramos a esas mujeres que actúan como niñas tontas sólo para llamar la atención

Neuronas en mi cabeza explotan cada vez que veo a una mujer hablar como niña consentida o fresa mientras habla con sus amigas sobre qué cosas compró, a dónde se irá de vacaciones o con quien se besó.

Lo mejor que nos puede suceder, es encontrarnos con alguien que piense igual que nosotras

Me haría muy feliz saber que no soy la única a la que le sucede todo esto.

Nota: Es lógico que tenemos sentimientos, pero sólo los demostramos cuando en realidad son necesarios y con personas que sí valen la pena. Cada cabeza es un mundo y posiblemente el nuestro sea muy diferente al de la mayoría.